El Yoga del reír

El Yoga del reír

«Nos hace entrar en una alegría propia de los niños,
propicio a abandonar las inhibiciones
y las formalidades habituales de la vida adulta.»
Imagen de Ben Kerckx en Pixabay

El Yoga del Reír (Hasya Yoga) nace en 1995, como disciplina para la salud corporal, a partir de una idea de un médico generalista indio, el doctor Madan Kataria, que la inventó sobre la base de sus estudios sobre los beneficios que conllevaba la risa para la salud humana. El doctor Kataria dio origen así al movimiento del club del reír que, el 13 de marzo de 1995, empezó con sólo cinco miembros, pero se extendió después por toda la India como la pólvora.

Desde los años 1960 en los Estados Unidos, ya entonces, se estudiaban y exploraban de manera científica los beneficios de la risa sobre las personas. Tanto es así que en los últimos treinta años nació una nueva disciplina: la Gelotología. Disciplina que estudia y aplica la risa como terapia para estimular y activar los complejos mecanismos implicados en el proceso de curación.

El Yoga del Reír es una disciplina enfocada a aprender a ‘reír sin motivo’, a desarrollar la risa incondicional, diafragmática y profunda y a respirar con la respiración Pranaiama, propia del yoga. Es la única técnica que permite a los adultos producir una risa potente y prolongada mediante ejercicios de reír que, con el tiempo, se vuelven cotidianos.

Por eso es importante practicar esta disciplina para que los beneficios se vuelvan permanentes. Para participar sólo hay que aportar un poco de ganas de reír… y el grupo se encarga del resto.

Haz que tu cuerpo ría y tu mente te seguirá

Reímos como forma de ejercicio y rápidamente producimos una risa real que se ve favorecida por el contacto visual con las otras personas presentes en la sesión y por el juego. Nos hace entrar en una alegría propia de los niños, propicio a abandonar las inhibiciones y las formalidades habituales de la vida adulta.

Como han demostrado numerosas investigaciones realizadas en el campo de la neurociencia, existe una estrecha conexión entre el cuerpo y el estado mental.

De manera que, si asumimos una determinada postura o utilizamos un determinado gesto, también llamado mimetismo, la mente reaccionará automáticamente sin preguntarse si es real o si estamos fingiendo. Así que, por mucho que sea un reír forzado, el cuerpo empieza a reaccionar de la misma manera que si es real.

Este proceso también se aplica a la inversa. Por lo tanto, si actuamos sobre nuestra mente llevando nuestra atención a un estado de positividad, nuestro cuerpo reaccionará en consecuencia.

Beneficios

  • Libera endorfinas, la hormona de la felicidad. Las endorfinas actúan sobre el estado de ánimo, así como sobre el organismo.
  • Promueve la producción de dopamina y serotonina, que actúan sobre la memoria y la concentración.
  • Aumenta las reservas de oxígeno, tanto en el cerebro como en el resto del cuerpo.
  • Es el método más rápido, más barato y científicamente probado para reducir el estrés físico, mental y emocional reduciendo sus efectos negativos, que son la causa del 70-80% de todas las enfermedades.
  • Fortalece el sistema inmunológico, reduce la presión arterial alta, ayuda a controlar los niveles de azúcar en la sangre y fortalece el corazón.
  • Es un poderoso ejercicio para el sistema cardiovascular. De hecho, diez minutos de risas a carcajadas equivalen a treinta minutos de ejercicio aeróbico (por ejemplo, ejercicios con máquina de remo).
  • Es una energía positiva que conecta a las personas y te ayuda a hacer amigos fácilmente. Al participar en las sesiones, atrae más risas a la vida de las personas sin molestarte en preguntar si tienen sentido del humor o no.
  • Ayuda a superar momentos de depresión, una enfermedad muy extendida hoy en día.
  • Promueve una actitud mental positiva para entrar en contacto con situaciones negativas y nos ayuda a relacionarnos con situaciones y personas difíciles de manera diferente.
  • Te pone en contacto con tu niño interior, con tus emociones y, si progresivamente te das permiso para reír, liberas obstáculos internos. Cada uno a su ritmo, sin forzar.

Estos beneficios sólo se consiguen mediante una práctica regular.

Guía CACCIANDRA
Profesora del Yoga de la Risa
Milán, Italia
Publicado originalmente en en la Revista RE num. 120, edición catalana

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