Este año he tenido el privilegio de participar, como observadora, en un grupo de mujeres que han pasado por una situación de violencia machista, algo tan terrible como indica el título o mucho peor aún si a estas personas les pones cara, mirada, historia y nombre, si en cada una de las sesiones descubres que lo que ya conocías no era lo peor, podía ser aún más duro.
Durante estos meses, cada semana hemos podido ser testimonios de cómo vidas, que alguien ha decidido romper, ir dañando día a día, casi hasta que la persona víctima de tal crueldad pueda acostumbrarse a ese sufrimiento hasta casi pensar que forma parte de la normalidad, incluso que ella es la responsable de lo que sucede y que, como no puede cambiar, pues igual hasta lo merece.
Escuchando los relatos en primera persona una se sorprende descubriendo la valentía de aquella que se ha dejado anular en algunos momentos, por otra persona que, seguramente no tiene ni la décima parte del valor que ella para sostener la vida.
Y toca seguir adelante porque la vida no permite bajarse, hay que continuar y hacerlo sosteniendo la cotidianidad, la vida laboral, las hijas e hijos, lo social, …. todo ello mientras por dentro corren lágrimas de dolor y de miedo, vergüenza, impotencia, sin embargo, siguen adelante y lo hacen con fuerza y brillo.
En la última sesión pudimos regalarles una reproducción de un libro artístico, “El hilo rojo del destino” de una artista novel que plasmó en él su proceso de transformación, en el mismo espacio y tiempo, paralelamente al grupo y que plasma de manera brillante el paso del dolor y la anulación a la posibilidad de generar fruto para el entorno y ser semilla de transformación para una misma y para otras y otros.
Acompañar procesos es siempre un regalo y, en este caso, ofrece la lección de saberse agradecida por estar aquí y por poder presenciar el milagro de la transformación que hace brotar vida de allí donde parecía que sólo había dolor y muerte.
Gracias a cada una de vosotras por este caminar.
Esther BORREGO LINARES
Trabajadora social
Barcelona
Enero de 2025