El pasado sábado 15 de octubre tuvo lugar la inauguración del nuevo curso de la Tertulia artística Marina de Castarlenas con un recital didáctico a cargo del arpista paraguayo Rubén Darío González.
El arpa paraguaya es un instrumento musical de cuerda pulsada, característico del Paraguay, fruto de la confluencia de las culturas musicales europea y guaraní y derivada del arpa angular clásica. Fue introducida durante la colonización española en las misiones jesuíticas guaraníes a finales del siglo XVII, y fueron los religiosos de la Compañía de Jesús, junto con los guaraníes, quienes modificaron el arpa clásica de modo tal que resultara algo más pequeña a fin de ser interpretada por un músico sentado. Está construido íntegramente de madera y generalmente consta de 36 cuerdas, aunque las hay de 32, 38, 40 y 43.
Rubén Darío se inició en la música siendo niño y lleva veinticinco años vinculado al mundo educativo y musical. Estudió piano, lenguaje musical y composición en Estados Unidos durante cuatro años. Ha participado en festivales de folklore en Latinoamérica, así como en la musicalización de documentales.
El recital se inició con la pieza que lleva el nombre de Cascada, del compositor paraguayo Digno García. Fue un repertorio de contrastes, con una primera parte llena de música popular en tono mayor y de mucha alegría, desde la polca paraguaya y las guaranías, pasando por la Cueca Chilena que fue acompañada por palmas por el público presente, y una composición de Violeta Parra, llamada La jardinera.
La segunda parte estuvo compuesta por baladas y temas de películas: Romeo y Julieta y Autumn leaves, estudios para arpa en Do mayor, samba argentina y bossa-nova: Mañana de carnaval. Fue muy emocionante cuando interpretó El tren lechero, onomatopeya del tren de vapor que en Paraguay funcionó hasta 1994.
Rubén nos comentó que el escudo de Irlanda lleva incorporada un arpa, instrumento nacional de este país. Interpretó la pieza tradicional Danny boy arreglada para arpa. Hubo por parte del público la petición de una pieza de un compositor uruguayo, Roberto Perera. Y aún quedó tiempo para un bolero y la guarania Flores de Asunción, de Ismael Ledesma, compositor paraguayo residente en Francia. Para finalizar el arpista hizo un bis de La jardinera, con participación de todo el público.
Terminamos el acto compartiendo unos dulces y un buen rato de convivencia. Todos los asistentes quedaron muy impresionados por la calidad del recital didáctico y la proximidad del arpista.
Quedó así inaugurado el curso y con buen sabor de boca esperando la próxima tertulia.
Os compartimos una de las piezas paraguayas interpretadas por Rubén Darío González: El pájaro campana.
Assumpció RODÀ CORTEY
Profesora
Barcelona (España)
Noviembre de 2022