Meditación 3.0

Meditación 3.0

El aprendizaje de la meditación no es ajeno al proceso de digitalización

El día 21 de mayo de 2021 fue el día mundial de la meditación. Un día que nos sirve para recordar que en la meditación no se trata solo de buscar un poco de silencio o descansar el cuerpo. La meditación ayuda a generar un cambio concreto en la vida de las personas. Es un entrenamiento de la mente que busca crear un espacio de interiorización. Se está convirtiendo en un complemento de nuestro bienestar.

La pandemia de la COVID, además de las devastadoras e inquietantes consecuencias que ha supuesto para la salud de las personas, ha generado una ola que ha afectado también a su psicología. Según datos publicados recientemente sobre la afectación de la depresión en el Reino Unido y Estados Unidos durante el período de pandemia, en comparación con períodos anteriores a ésta, se confirma que las tasas se duplican literalmente en el Reino Unido y se multiplican por cuatro en los Estados Unidos.

Está claro que ante la negatividad que existe alrededor de las noticias que consumimos diariamente, junto con el estrés que continúa produciendo la pandemia, la meditación se está convirtiendo en un aspecto fundamental para el cuido de nuestro bienestar y salud integral.

No en vano el uso de aplicaciones digitales App, relacionadas con la salud mental y emocional, crecieron un 130% en los primeros meses del 2021 con respecto al año anterior. Cada vez más personas acceden a propuestas de meditación y relajación digitales para buscar un equilibrio en su vida diaria.

Meditar, nos permite dejar de pensar, temporalmente, en todo el caos que gira a nuestro alrededor y poder ver las cosas en una mayor perspectiva, dejando espacio en nuestra mente para otras cuestiones que seguramente fluyen en nuestro interior.

No supone esto que tengamos que despreocuparnos, descartando los problemas reales. No significa que no nos sintamos tristes, temerosos o enojados cuando así lo propicia una situación. No significa que dejemos de expresar nuestra indignación moral o que nos mostremos indiferentes ante las injusticias de nuestro entorno.

Precisamente la meditación supone lo contrario, facilita que encontremos el camino para, siendo plenamente conscientes de la realidad y sus consecuencias, podamos hallar la alegría en nuestra vida cotidiana y repensar nuevas maneras de construir el mundo.

La digitalización también a alcanzado la práctica de la meditación, creando para ello herramientas digitales focalizadas en mejorar el bienestar de las personas. Para ello se toman los mejores conocimientos de la neurociencia, las tradiciones contemplativas y el aprendizaje basado en habilidades y, como si fuera un cóctel perfectamente ordenado, se paquetiza en módulos fáciles de usar mediante aplicaciones App que ayudan al usuario en las técnicas de la meditación y mejoran su bienestar. Son herramientas digitales de entrenamiento que no requieren del soporte de terceras personas y pueden practicarse en cualquier lugar.

Son herramientas que, por lo general, facilitan el proceso de concentración e interiorización, propician el aprendizaje de habilidades de interrelación positiva con el resto de los individuos, aumentan las habilidades de gestión de los pensamientos y emociones y por último ayudan a alinear los valores y creencias respecto a los actos concretos de nuestra vida.

En definitiva, es como tener un entrenador personal en el ámbito de la meditación. Cualquier práctica requiere un entrenamiento y una regularidad. Del mismo modo las aplicaciones digitales sobre la meditación ayudan a mejorar el bienestar y la salud ofreciendo una metodología y propiciando la continuidad necesaria para que se convierta en una cotidianeidad. Un ejemplo de aplicación desarrollada en este ámbito la podemos localizar en el siguiente enlace que nos lleva a una App gratuita creada por el Center for Helthyminds de la Universidad de Wisconsin-Madison:  https://apps.apple.com/us/app/healthy-minds-program/id1326310617

La digitalización ya forma parte intrínseca de nuestras vidas, las nuevas generaciones construyen su cotidianeidad a través de múltiples y variadas aplicaciones digitales App. La meditación no es ajena a este proceso de digitalización y una práctica más generalizada de la meditación nos ayudaría a crear individuos en paz consigo mismos y más resilientes frente a los impactos del entorno.

David MARTÍNEZ
Economista
Barcelona (España)
Junio del 2021

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